Porque me agrada sentir cómo entra
la brisa en la brecha que dejas.
Júlia Peró
Cada vez que hemos caminado
en direcciones opuestas
nuestras espaldas han terminado chocando
porque cada vez que atisbamos juntos
el final de este viaje
nos convertimos en inicio.
en direcciones opuestas
nuestras espaldas han terminado chocando
porque cada vez que atisbamos juntos
el final de este viaje
nos convertimos en inicio.
Y de las cenizas de ideales rotos
de papeles mojados
de promesas fallidas (que no vacías)
hemos surgido fénix.
de papeles mojados
de promesas fallidas (que no vacías)
hemos surgido fénix.
Porque, quizás, después de todo,
el amor sí era el dolor
y también la lágrima.
el amor sí era el dolor
y también la lágrima.
Pero del dolor que engendra vástagos
y de la lágrima que brota el río.
y de la lágrima que brota el río.